Endesa supera el impacto del covid en 2020 con un incremento del 36% en su resultado ordinario neto
Los resultados del año 2020 demuestran una sólida evolución de su desempeño económico pese a los desafíos que ha supuesto el impacto de la pandemia durante el ejercicio. Al mismo tiempo, la empresa recoge ya los frutos de su decidida apuesta por la sostenibilidad tanto en términos de reconocimiento internacional como en avances en descarbonización que permiten cumplir, con dos años de anticipación, sus objetivos de generación eléctrica libre de emisiones de gases de efecto invernadero (CO2). En concreto, el año se cerró con un 85% de la generación peninsular sin este tipo de emisiones, meta prevista inicialmente para 2022.
En primer lugar, Endesa ha logrado un beneficio ordinario neto de 2.132 millones, un 36% más que en 2019. Esta cifra es la base para el reparto del dividendo, que superará las previsiones anunciadas al mercado al elevarse hasta los 2,014 euros por acción, y que supone un 37% más que el año anterior. Con ello, la rentabilidad por dividendo de Endesa se situará en aproximadamente el 9% calculado sobre la cotización a 31 de diciembre. Endesa repartirá el 100% de su beneficio ordinario neto de 2020 entre sus accionistas. Desde 2021 emprenderá una nueva senda de progresiva reducción del payout desde el 80% para el presente ejercicio, hasta el 70% anunciado para 2022 y 2023 para adecuar el relevante incremento de la inversión prevista para los próximos años: 7.900 millones entre 2021 y 2023, y 25.000 millones hasta el año 2030.
La compañía eléctrica eleva el resultado bruto de explotación en términos comparables a 4.027 millones, un 5% más
El beneficio neto atribuido a la sociedad dominante, que tiene en cuenta los impactos extraordinarios del ejercicio, se sitúa en 1.394 millones incluyendo un deterioro de los activos de generación en los territorios no peninsulares de 253 millones. En 2019 esta magnitud se situó en 171 millones tras verse fuertemente influenciada por la provisión para acometer el cierre del negocio de generación con carbón (1.105 millones) y otro relacionado igualmente con la generación no peninsular (304 millones).
En cuanto al ebitda (beneficio bruto de explotación) crece el 5% respecto a 2019 en términos comparables (excluidos los impactos en gastos de personal derivados de la aplicación del V Convenio Colectivo Marco y las provisiones asociadas al Plan de descarbonización y digitalización de procesos). Se sitúa en 4.027 millones. Si se tienen en cuenta esos conceptos, esta magnitud se sitúa en 3.783 millones lo que supone un descenso del 1,5% respecto al año anterior. Endesa ha asumido un impacto de 120 millones en su ebitda como consecuencia del covid.
Ha registrado un resultado ordinario neto de 2.132 millones el pasado año, lo que supone un 36% más que en 2019, superando las previsiones anunciadas
José Bogas, consejero delegado de Endesa, señala sobre los resultados de 2020: “Hemos logrado un sólido comportamiento operativo y financiero en un ejercicio que ha estado lleno de desafíos a todos los niveles derivados del impacto de la pandemia. Mantenemos nuestra senda de descarbonización, digitalización y de impulso a la electrificación sobre la base de unos sólidos resultados que nos van a permitir, además, distribuir un dividendo realmente sobresaliente en la actual coyuntura. El año 2020 es además el ejercicio en que hemos materializado de forma palpable nuestro lema de no dejar a nadie atrás, ni como consecuencia del proceso de Transición Energética que entendemos debe ser justa, ni como consecuencia del golpe del covid, contra el que hemos desplegado un Plan de Responsabilidad Pública dotado con 25 millones de euros”.