Marc Márquez, la naturalidad

ESTRATEGIA / TALENTO

FEDERICO FERNÁNDEZ DE SANTOS: La exigencia psíquica requerida a los pilotos es tanto o más elevada que la física, ¿cómo consigues mantener el equilibrio y un nivel de exigencia tan elevado?
MARC MÁRQUEZ, piloto del Equipo Repsol Honda: Creo que depende mucho de la mentalidad de cada uno desde pequeño. En este sentido, he tenido bastante suerte, porque trabajo mejor con presión y doy más de mí mismo; pero sí es un tema duro, sobre todo cuando no te salen las cosas. Hay que aprender a no darle demasiadas vueltas a la cabeza ni pensar barbaridades, porque así solo conseguirás ir a peor.

F.F.S.: Cuando estuvimos con Dani Pedrosa y Alberto Puig descubrimos la importancia de tener un mentor para el desarrollo de tu carrera. ¿Qué representa una persona como Emilio Alzamora en la tuya?

M.M.: He sido un privilegiado por contar con él desde los 12 años, algo especialmente importante porque, cuando estás en la base, coges vicios en el estilo de pilotaje que son fáciles de cambiar a esa edad, pero no después. 
Tener a mi lado a una persona de confianza como Emilio me ha ayudado mucho.

F.F.S.: Nos comentaba Alberto Puig que en el mundo de las motos existen “intereses diferentes”. ¿Cómo se aprende a desarrollar la capacidad para distinguir los intereses de los interesados?
M.M.: Es difícil. Por mucho que creas que lo verás rápido, seguramente a lo largo de mi carrera deportiva se dará alguna situación o alguna persona que me la acabará colando. 
Creo que hay que ser prevenido e ir con pies de plomo. Por eso, ayuda mucho estar acompañado por la gente que siempre te ha seguido porque ha querido, desde los 12 años, cuando no había ningún interés de por medio.

F.F.S.: Para el filósofo José Antonio Marina, la generosidad es un síntoma de inteligencia. ¿Hasta qué punto crees que es importante la generosidad con los que están debajo?
M.M.: Es fundamental. Mucha gente considera el motociclismo como un deporte individual, pero es justo lo contrario. Todo el equipo, desde el que cambia las ruedas, el que hace la gasolina…, hasta el máximo jefe, tiene que estar 100% motivado si realmente queremos conseguir el objetivo. Entrar en un Campeonato cuesta mucho y hay que trabajar en la misma dirección. 
Lo que yo busco es un equipo profesional, que sepa hacer su trabajo, pero también un equipo muy humano, que exista una buena compenetración entre todos.

F.F.S.: Además de la generosidad, otra característica que suele definir a los deportistas de elite es la humildad. Siendo ahora alguien reconocido y perseguido por las cámaras, ¿qué te ayuda a mantener los pies en el suelo?
M.M.: Mi familia, mi hermano, seguir saliendo con los mismos amigos que tenía cuando estudiaba y por los mismos sitios. Lógicamente, hay lugares –como una feria donde haya muchos niños–, a los que no puedo ir, pero intento que mi mundo no cambie. Y, por supuesto, le doy permiso a mi gente para que, si me ven cambiar, me llamen la atención y me den una colleja si es necesario.

F.F.S.: En más de una ocasión has declarado que Pedrosa era tu ídolo. Ahora que compartís equipo, ¿cómo piensas que va a evolucionar la relación?
M.M.: Todo dependerá de los resultados, pero yo siempre he tenido a Dani como un referente. Para mí es un privilegio formar equipo con él y creo que lo bueno es que, en la pista, habrá rivalidad. En el mundo de las motos, siempre se dice que el primer rival es tu compañero de equipo. Fuera de la pista, no veo que tengamos que cambiar para nada nuestra relación.

Entrevista publicada en Executive Excellence nº105 sep13