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Red Eléctrica avanza en la gestión de la ética

(Tiempo estimado: 4 - 8 minutos)

La historia de la humanidad nos demuestra que la falta de ética es el origen de la mayoría de los problemas que surgen en el mundo. Por tanto, la solución de los mismos pasa inevitablemente por un comportamiento ético de los dirigentes tanto en el ámbito político como en el empresarial.

La ética es un activo de la empresa, que debemos ver como un potenciador y facilitador de buenas prácticas. En este sentido, la organización ha de ser capaz de crear un marco ético dentro del cual sus trabajadores se comporten de acuerdo con unos valores corporativos, porque eso es lo que esperan de ella los diferentes grupos de interés. Una actuación eficaz en las situaciones en las que la integridad y la ética de la empresa lo requieran supondrá la consolidación de una reputación intachable y una proyección satisfactoria ante el sector y ante la sociedad en general. 

Bajo esta premisa, Red Eléctrica aprobó en el año 2013 su Código Ético; un documento que contiene los valores corporativos que han de guiar la conducta de los miembros de la organización y orientarnos en la toma de decisiones, y que recoge, de forma explícita, las pautas de comportamiento que hemos de seguir, formuladas a través de principios y de compromisos. 

Muchos de estos valores y compromisos no son nuevos; nos han acompañado desde que, en 1987, editamos el primer sistema de valores compartidos, bajo el título “Principios básicos de actuación”. En el año 2007, nuestro compromiso ético se reforzó con la edición del documento “Código Ético y valores corporativos”; la puesta en marcha del canal público de consultas y denuncias, y el nombramiento de la figura del Gestor Ético como máximo responsable del desarrollo, consolidación y mejora continua de la gestión de la ética en Red Eléctrica.

Desde su constitución en 1985, el compromiso del Grupo Red Eléctrica ha sido aportar a los sistemas eléctricos y a los ciudadanos un servicio de valor, con la máxima calidad y con el menor coste posible, respetando escrupulosamente la normativa aplicable en el desarrollo de sus actividades y estableciendo las más transparentes y éticas relaciones con los organismos reguladores y con todos los grupos de interés.

La orientación hacia la excelencia en la gestión y hacia la prestación del mejor servicio se completa con el compromiso de apoyar inexcusablemente el desarrollo sostenible, estableciendo como metas estratégicas lograr la perdurabilidad de la compañía en el tiempo; minimizar la huella ecológica proveniente de nuestras actividades; maximizar la seguridad y salud laboral de empleados y contratistas; apoyar el desarrollo y consolidación social; evidenciar un comportamiento ético, y lograr la mejor reputación.

Accionistas, inversores, clientes, proveedores, tercer sector, analistas y la sociedad en general exigen cada día mayores cotas de responsabilidad a las empresas. Dar una respuesta eficaz a tales exigencias constituye una de las claves de la reputación. Cada persona de la compañía puede influir en ella a través de la manera en que realiza su actividad y de las relaciones que establece en su quehacer diario con estos colectivos. Depende de todos mantener esa reputación actuando con integridad, responsabilidad y respeto.

Para gestionar la confianza depositada en la empresa por parte de todos los grupos de interés, es necesario que estos tengan la oportunidad de conocer el modo en que la empresa lleva adelante sus compromisos y los resultados alcanzados. Con un decidido espíritu de transparencia, es conveniente facilitarles toda la información que necesitan para tomar sus decisiones. La participación de los diferentes grupos de interés en la elaboración o, al menos, control de esta información es imprescindible, siempre y cuando queramos convertir esta información en un recurso capaz de generar confianza. 

En este sentido, nuestra compañía designó a un Gestor Ético para dar respuesta a las dudas que se pudieran producir en la interpretación del Código Ético y para recibir, analizar y resolver las denuncias relacionadas con el comportamiento ético. El secretario general de Red Eléctrica, en relación directa con el presidente y con el Consejo de Administración, del que es secretario, es el responsable del desarrollo, consolidación y mejora continua de la gestión del Código Ético del Grupo Red Eléctrica, y es el encargado de mantener la confidencialidad de los procesos que puedan derivarse del control de su cumplimiento.

Para favorecer su aplicación, existe un procedimiento de gestión de consultas y denuncias del Grupo Red Eléctrica. Dicho procedimiento, que ha sido informatizado y auditado, garantiza la confidencialidad de los denunciantes.

El Gestor ético elabora anualmente un informe de funcionamiento del sistema de gestión en el que se analizan los expedientes y las consultas planteadas durante el año. A partir de esta información y de las sugerencias recibidas de los distintos grupos de interés, se identifican las posibles áreas de mejora. El Gestor ético eleva este informe al Comité de Dirección y a la Comisión de Gobierno y Responsabilidad Corporativa del Consejo de Administración, que proponen, en caso de considerarlo pertinente, las mejoras oportunas para su incorporación como nuevo proyecto dentro del programa anual de responsabilidad corporativa del ejercicio siguiente.

Del mismo modo que consideramos importante el afianzamiento del Código Ético entre todas las personas que conformamos Red Eléctrica, nos parece fundamental que los proveedores se acojan al Código de conducta que en enero de 2014 entró en vigor, formando parte de las Condiciones generales de contratación de la compañía. 

Por otra parte, avanzar en la adopción e implantación de las mejores recomendaciones internacionales en materia de buen gobierno constituye un objetivo estratégico en la gestión empresarial de la compañía. Por ello, con objeto de introducir nuevas prácticas en materia de gobierno corporativo, hemos llevado a cabo la modificación de los Estatutos Sociales. Entre las novedades incorporadas, destaca la adopción de medidas de contrapeso a la concentración de poder del primer ejecutivo y presidente del Consejo de Administración de la Sociedad y otras medidas que permitan, en su caso, la separación de ambos cargos.

En este sentido, creamos el cargo de Consejero Independiente Coordinador (Lead Independent Director), cuyo cometido fundamental es organizar las posiciones comunes de los consejeros independientes y servir de cauce de interlocución de tales posiciones ante el presidente del Consejo de Administración, el propio Consejo y sus Comisiones.

Otra de las novedades introducidas es la adaptación de la composición de las comisiones del Consejo, fortaleciendo su independencia. Así, en 2012, se renovaron las dos comisiones del Consejo, la de Auditoría y la de Gobierno y Responsabilidad Corporativa. Ambas están compuestas exclusivamente por consejeros externos, con mayoría de consejeros independientes, y presididas por consejeros independientes.

Además, atendiendo a las recomendaciones de los inversores y los proxy advisors, se ha incrementado la transparencia en materia de política de retribuciones del Consejo y la Alta Dirección. Con la incorporación de estos avances en materia de gobierno corporativo, la compañía cumple la totalidad de las recomendaciones del Código Unificado de Buen Gobierno. 

Es tan relevante este asunto para Red Eléctrica que, existiendo ya un Departamento de Responsabilidad Corporativa, hemos creado el Departamento de Gobierno Corporativo, cuya principal misión es reforzar nuestro compromiso con las mejores prácticas y recomendaciones de Gobierno Corporativo, en especial las que provienen de nuestros accionistas extranjeros (que representan el 70% de nuestro accionariado), y consolidar así a Red Eléctrica entre las empresas situadas en vanguardia en esta materia.

La necesidad de dar un impulso ético a las organizaciones hace que la implantación de mecanismos de control preventivo del cumplimiento normativo o compliance se esté conformando como una de las prácticas más demandadas por los grupos de interés, así como una necesidad detectada internamente dentro de las organizaciones, ya que está estrechamente vinculado con el buen gobierno y la responsabilidad corporativa de las organizaciones.

Desde Red Eléctrica, estimulamos la existencia de una actitud generalizada de respeto a las normas por parte de la compañía y consideramos que este objetivo solo es alcanzable y sostenible si dicha voluntad es conocida, comprendida y compartida por todas las personas que la integran, traduciéndose en su conducta diaria. El cumplimiento normativo no debe entenderse como una actividad aislada; en Red Eléctrica, lo consideramos un elemento integrado en todos los aspectos de la organización. La clave está en generar el convencimiento de que el cumplimiento normativo no es una barrera, sino un elemento de ayuda para el buen funcionamiento de la compañía y un aspecto esencial para su perdurabilidad, así como una ventaja competitiva.

Red Eléctrica es una de las compañías que avanza en materia de gestión de la ética empresarial, pero aún queda mucho camino por recorrer. Lo importante es que seamos conscientes de su importancia y que trabajemos día a día para mejorar el nivel ético de nuestras empresas, haciendo autoexamen y adelantándonos con nuestras actuaciones a las medidas jurídicas.


Artículo publicado en Executive Excellence nº119, febrero 2015.

José Folgado Blanco, presidente de Red Eléctrica de España


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