De Gowex y otras “trufas”
FEDERICO FERNÁNDEZ DE SANTOS: Hemos vivido unos días intensos con el escándalo de Gowex. Que esta “trufa” sea privada parece que la ha hecho tener más impacto bursátil que otros hechos acaecidos en el sistema financiero español. ¿Son tan diferentes?
PABLO FERNÁNDEZ: Una diferencia importante, que quizás haya generado un efecto de impacto súbito, ha sido la ausencia de señales previas y claras de la situación de Gowex. Que hace muy poco les hubiesen otorgado el Premio Nacional de Marketing es un claro indicador. No creo que la Asociación Nacional de Marketing les hubiese concedido este reconocimiento si hubiesen tenido sospechas de su situación.
En el caso de las Cajas de Ahorros, las autoridades (Ministro/a de Economía, Gobernador del Banco de España…) estaban avisadas y las noticias fueron continuas –así como las sospechas de balances no reales por las valoraciones de activos–, lo cual reduce el impacto en la percepción pública, aunque el número de afectados (personas que han perdido sus ahorros) por la mala gestión de las Cajas es muy superior.
F.F.S.: ¿Qué aspectos le resultan comunes entre las Cajas de Ahorros y Gowex?
P.F.: Como aspectos idénticos destacaría en primer lugar la existencia de balances y cuentas de resultados que no se ajustan a la verdad de la situación; vamos, sin paños calientes, unos balances falsos. Ahora bien, estamos hablando de una sociedad cotizada en el mercado alternativo de la Bolsa, con lo cual, deberíamos estar hablando de una sociedad con sus balances auditados. De ello deducimos, con lo que ahora confiesa Jenaro García, que debe de haber existido una cooperación necesaria de la empresa que les auditaba; una colaboración en el engaño por mucho que se cubran con frases del tipo: “En nuestra opinión, las cuentas… expresan, en todos los aspectos significativos, la imagen fiel del patrimonio y de la situación financiera…, así como de los resultados de sus operaciones”.
La primera conclusión que podemos extraer de lo anterior es que han realizado una venta de instrumentos financieros a inversores (y clientes y empleados), amparándose en la falsa imagen de unas cuentas auditadas falsas.
Por último, otro aspecto común entre Gowex y lo acaecido en algunas Cajas de Ahorros es la no-actuación de la CNMV, un organismo que entre sus objetivos tiene –y así aparece en su página web– el de “velar por la transparencia de los mercados de valores españoles y la correcta formación de precios, así como la protección de los inversores”. Si se hubiese actuado con rigor y premura, todos los españoles nos habríamos ahorrado muchos disgustos y dinero.
El hecho es que en países con una democracia más asentada, por ejemplo los EE.UU., el tener balances y cuentas de resultados falsas o la colaboración de los auditores en estos balances falsos, son obviamente también un delito de falsedad en documento mercantil, pero con consecuencias mucho más inmediatas y graves, como también es delito la estafa que se comente al vender instrumentos financieros a inversores amparándose en una falsa imagen de cuentas auditadas no veraces, pero no podemos dejar de percibir que parecen ser más delitos que en nuestro país por las consecuencias.
F.F.S.: ¿Y en qué se diferencia el caso Gowex de los casos de las Cajas de Ahorros? Que no hayan intervenido políticos en la gestión de Gowex, ¿hace de este caso un hecho diferencial, desde su punto de vista?
P.F. Evidentemente sí, y se lo explico. En el caso de las Cajas de Ahorros, las autoridades (Ministro/a de Economía, Gobernador del Banco de España…) estaban avisadas (al menos por los inspectores del Banco de España) de la falsedad de los balances y cuentas de resultados desde, al menos, 2006.
Otro aspecto, cuya importancia legal desconozco, pero que a mí me parece importante, es que el presidente de Gowex ha pedido perdón, pero aún estoy por escuchar a los responsables del hundimiento de las Cajas verbalizar algo similar. Eso sí, creo haber leído en algún periódico que algunos han protestado por no recibir sus indemnizaciones o jubilaciones…
Es importante resaltar la escala de estas situaciones; si bien desde la perspectiva ética moral ambas situaciones son condenables, el número de afectados (personas que han perdido dinero) por la gestión de las Cajas es muy superior (más de 100 veces) al de afectados por Gowex, mucho más… y además, en el caso de las Cajas estamos hablando de ahorros de personas, y en el caso de Gowex de inversiones con búsqueda de mayor rentabilidad; no es que le quite peso a Gowex, es que el caso de las Cajas me parece que afecta a personas más desprotegidas.
Por último, me parece que el presidente de Gowex, Jenaro García, tendrá pocas “protecciones”. Sin embargo, hay responsables en el entorno de las Cajas de lo ocurrido, y antes descrito, que parecen estar o haber estado protegidos –al menos hasta la fecha– por el Banco de España, la CNMV o el FROB, pues no me parece recordar ninguna actuación contra nadie por esos conceptos de los que hemos hablado. Ni siquiera se ha comunicado en detalle cómo estaban esas Cajas que se unieron para formar los nuevos bancos.
Mirando hacia adelante, no parece probable que el presidente de Gowex engañe a más personas en un futuro cercano. Sin embargo, en el caso de las Cajas, la llamada “Gestión de instrumentos híbridos de capital y de deuda subordinada” ha supuesto en algún caso (ejemplo: Liberbank) una expropiación de inversores en favor de las Cajas. El FROB y la dirección del banco (que antaño dirigía una Caja) no ha respetado algo elemental: la preferencia de todos los instrumentos financieros sobre las acciones.
F.F.S.: Siguiendo con la perspectiva ética, no podemos dejar de mencionar a Daniel Yu, el fundador de Gotham City Research, la firma que destapó Gowex. Como él mismo ha declarado, actúa por venganza, buscando justicia tras perder mucho dinero a causa de la crisis de las hipotecas basura. ¿Cómo valora que exista un “Robin Hood” que se dedica a descubrir marrones? El hecho de que los destape y al mismo tiempo gane dinero, ¿hace de él un ladrón de Sherwood?
P.F.: Creo que sería deseable que un analista que recomienda comprar acciones de Iberdrola dijera que ha comprado (o estuviera obligado a haber comprado) una cantidad significativa de acciones de Iberdrola. Análogamente, creo que sería deseable que un analista que recomienda vender acciones de Iberdrola dijera que ha vendido a crédito (o estuviera obligado a haber comprado) una cantidad significativa de acciones de Iberdrola. De esa manera, tendrían ‘alguna’ credibilidad sus recomendaciones. Donde digo comprar acciones también vale comprar futuros, comprar forwards, comprar a crédito, comprar calls… y donde digo vender acciones a crédito también vale vender acciones de su cartera (si tenía), vender forwards, vender futuros, comprar puts…
Personalmente, no veo nada censurable en su comportamiento (de Daniel Yu). El problema que tiene mucha gente (y algunos reguladores) es que les parece bien ganar dinero cuando las cotizaciones suben, pero les parece mal ganar dinero cuando las cotizaciones bajan: esto solo se puede explicar por ignorancia, por esquizofrenia o por ambas.
Entrevista con Pablo Fernández, profesor de Dirección Financiera en IESE.
Publicada en Executive Excellence nº114 jul/ago14