Hacia la Red21, un modelo energético sostenible
Red Eléctrica de España (REE), como TSO español (Transmission System Operator, modelo que integra las actividades de Transporte y Operación del Sistema Eléctrico), tiene la misión de garantizar la correcta coordinación del sistema de producción y transporte de energía eléctrica asegurando la continuidad y seguridad del suministro. Además, es la responsable del transporte de la energía eléctrica en alta tensión para lo que construye, mantiene y opera las instalaciones de la red de transporte de energía eléctrica en España.
La sostenibilidad ambiental ha estado presente en la gestión de la compañía desde su creación en 1985. En 1987, REE ya contaba con un Servicio de Medio Ambiente y desde 1991, con un código de conducta ambiental. El sistema de gestión ambiental, de acuerdo con la UNE-EN ISO 14.001, se implantó en 1999 y desde el año 2001, la compañía está incluida en el Registro del Reglamento Comunitario de Ecogestión y Ecoauditoría (EMAS).
En un primer momento, la responsabilidad ambiental se asociaba principalmente con la presencia de las instalaciones en el territorio, siendo fundamental la toma en consideración de los aspectos sociales y ambientales en la definición, implantación y mantenimiento de las mismas. Poco a poco, los grupos de interés han ido demandando un compromiso mayor con los problemas ambientales globales, tales como el cambio climático.
El cambio climático sin duda constituye una de las cuestiones ambientales más relevantes y una de de las grandes preocupaciones tanto a nivel político como científico y social. En el mundo económico y empresarial, hay que destacar la relevancia que ha tomado como factor de seguridad y rentabilidad a la hora de acometer inversiones, siendo una de las principales cuestiones que valoran los analistas y ratings de sostenibilidad.
REE, consciente de la relevancia que tiene el desempeño de sus actividades en la lucha contra el cambio climático y atenta a las demandas de sus grupos de interés, ha adquirido y formalizado su compromiso mediante la definición de una Estrategia específica de Cambio Climático, aprobada en el año 2011, y revisada y firmada por el presidente en mayo de 2014.
El papel de REE como transportista y operador del sistema eléctrico español: hacia la Red21
El concepto de red eléctrica sostenible, en el que los objetivos de cambio climático de la Unión Europea 2020 y la implantación del Mercado Interior de la Energía (integración de redes y mercados) generan una serie de desafíos para realizar una gestión eficiente del sistema, es lo que se denomina Red21.
REE es así una pieza clave en la lucha contra el cambio climático, siendo el desempeño de las funciones de transportista de electricidad y operador del sistema imprescindibles a la hora de conseguir un sistema eléctrico más sostenible y cumplir los objetivos climáticos de la Unión Europea. Estos objetivos de la UE implican incrementar hasta el 20% la cuota de renovables en el balance energético, reducir un 20% las emisiones de efecto invernadero y alcanzar un 20% de ahorro energético. Estos objetivos energéticos responden a la necesidad de avanzar hacia un modelo energético más eficiente y sostenible en el uso de la energía, que reduzca nuestra dependencia energética exterior y contribuya a la lucha contra el cambio climático.
La incorporación de las energías renovables es esencial en la política energética europea y también lo ha sido para REE en los últimos años. Como responsable de la red de trasporte, REE ha llevado a cabo la construcción y puesta en marcha de las instalaciones necesarias para hacer posible la conexión de las instalaciones de energía renovable. Como operador del sistema, REE ha realizado un enorme esfuerzo por integrar la máxima producción de energía de origen renovable posible, que se pone de manifiesto día a día con el eficaz funcionamiento del Centro de control de energías renovables (Cecre. 2006), la herramienta tecnológica pionera mediante la cual se afronta el reto de incorporar al sistema eléctrico energías que tienen una gran variabilidad, difícil predictibilidad y menor capacidad de adaptación a la demanda, por su dependencia de las condiciones climáticas. El funcionamiento de este centro de control, referente mundial en la integración de renovables, ofrece una gran capacidad de respuesta para identificar los riesgos y anticipar los comportamientos de estas energías intermitentes y compensar su gran variabilidad, sin comprometer la calidad y seguridad del suministro.
La labor del Cecre ha contribuido a que la producción de energías renovables en el sistema eléctrico peninsular represente más del 40% de la producción anual de energía durante los últimos años, alcanzando, en algún caso, valores de cobertura horaria superiores al 80%, con la consiguiente reducción de la dependencia energética exterior.
Cabe destacar el papel que REE ha desempeñado en la evolución de la participación de las energías renovables en el mix energético español, que ha pasado de representar un 28% de la cobertura de la demanda en 2009 a un 42,8% en el año 2014 (máximo en el año).
Otro de los pilares de la política europea en materia de cambio climático es la eficiencia energética. Fomentar medidas de eficiencia energética y gestionar el cambio de rol, mucho más participativo, de los consumidores, suponen algunos de los desafíos a los que es necesario dar respuesta en los próximos años para lograr una gestión eficiente del conjunto del sistema y, en su conjunto, es prioritaria para REE. En este ámbito, son relevantes las iniciativas ligadas a la gestión de la demanda, que consisten en la planificación e implementación de medidas destinadas a influir en el modo de consumir energía, promoviendo su uso responsable. Entre estas medidas, se encuentran las relacionadas con el impulso a la implantación del vehículo eléctrico.
Además, tanto para la mayor integración de energías renovables como para la mejora de la eficiencia del sistema son fundamentales: el desarrollo de una red cada vez más mallada, el fortalecimiento de las interconexiones internacionales y entre islas (Canarias y Baleares), y el desarrollo de iniciativas innovadoras como las redes inteligentes y los proyectos en el ámbito del almacenamiento de energía. Estos aspectos constituyen los principales retos de la compañía para los próximos años.
El compromiso de REE con el cambio climático
REE es consciente de que la acción frente al cambio climático no puede venir dada únicamente de las iniciativas públicas, sino que es necesaria la implicación de las empresas y de la sociedad civil. Por eso, además de trabajar en el ámbito de sus actividades, ha decidido adquirir un compromiso firme de reducción de sus emisiones de GEI y de trabajar para extender este compromiso a sus grupos de interés (principalmente a sus proveedores y a la sociedad).
De acuerdo con los principios establecidos en su estrategia de cambio climático, REE ha definido un ambicioso Plan de Acción, aprobado en mayo de 2015. Como objetivo principal en relación con sus emisiones de GEI, la compañía se ha fijado la reducción o compensación del 21% de las mismas respecto al año 2010, en el horizonte 2020. Las medidas previstas se centran en tres elementos de trabajo: el control de las emisiones de SF6, la reducción de consumos energéticos y la compensación de emisiones, principalmente mediante el proyecto “El Bosque de REE”, que ha permitido en sus nueve ediciones compensar más de 130.000 toneladas de CO2.
Merece especial mención la apuesta de la compañía por la eficiencia energética como herramienta fundamental en la lucha contra el cambio climático. En el plan se contempla el desarrollo de medidas de eficiencia en las instalaciones y en los centros de trabajo. Destacan las medidas relacionadas con la movilidad sostenible que se articulan en un Plan de Movilidad específico y las actividades dirigidas a la formación y sensibilización de la sociedad para un consumo responsable de energía eléctrica.
Por último, cabe resaltar que, además de las actuaciones dirigidas a la mitigación, REE ha comenzado ya a trabajar en el estudio de las necesidades de adaptación a las situaciones que pudieran derivarse del cambio climático.
La ciudadanía demanda cada vez más el compromiso del sector privado en la lucha contra el cambio climático y ya son muchos los expertos que señalan el papel que las empresas tienen a la hora de impulsar determinadas decisiones de los gobiernos. En este sentido, es importante mencionar la adhesión de REE al Grupo Español de Crecimiento Verde, iniciativa impulsada por el Ministerio de Medio Ambiente, por la que las empresas firmantes reconocen la necesidad de impulsar un cambio de modelo hacia una economía baja en carbono y se comprometen a trabajar para ello. REE también ha sido una de las empresas firmantes de la Declaración de Barcelona, presentada en el marco de Carbon Expo 2015.
Artículo publicado en Executive Excellence nº122 junio 2015.