Ahora lo sensato es ser audaz
Club Excelencia en Gestión: En recientes intervenciones, lejos de hablar de un final de la crisis, ha incidido en que ésta es más intensa y más profunda.
Juan Antonio Zufiria: Yo creo que tenemos que entender claramente a qué nos enfrentamos y en qué entorno tenemos que resolver los problemas. Hablo de una crisis más intensa por la dificultad sin precedentes en el acceso al crédito y al capital; por la caída brusca de la demanda; porque los mercados están dominados por el exceso de oferta y también por la sensibilidad creciente a los precios por parte de empresas y consumidores. Además, nos movemos en la tensión en el corto plazo.
CEG: ¿Alguien está dominando esta situación? ¿Alguien está encontrando el camino de salida?
J.A.Z.: Esta crisis toca pilares fundamentales y vivimos un cambio muy profundo porque los sectores industriales se están reconfigurando y se están buscando nuevos modelos de negocio. En este momento se están librando batallas importantes para definir ganadores o perdedores. Detrás de lo que parece atonía hay gran actividad en este momento y se están tomando decisiones que configurarán el crecimiento de los próximos años.
CEG: ¿Cambia el liderazgo también?
J.A.Z.: Las crisis nos llevan a mirarnos en el espejo, aunque ya sabíamos que teníamos problemas estructurales. Tenemos que ser conscientes de nuestros puntos fuertes y también de lo que debemos cambiar. El liderazgo, ahora, en gran medida significa romper con ideas y situaciones pasadas.
CEG: ¿Como cuáles?
J.A.Z.: Estamos en la “era de la inteligencia”, de las organizaciones, ciudades y países inteligentes; una era en la que debemos utilizar la tecnología para rehacer los procesos y dar un salto cualitativo porque hemos llegado a una sociedad con niveles de gran complejidad. El 70% de la población mundial vivirá en ciudades, el 1% del PIB europeo se pierde en atascos... Hoy podemos actuar para resolver estos problemas a través de la tecnología.
CEG: En España en concreto, ¿qué cambios hacen falta en las empresas?
J.A.Z.: Este país ha dado un salto muy grande en los últimos años, pero todavía nos falta atrevernos. Ahora, lo más sensato es ser audaz. Ahora se abren las grandes brechas entre los que actúan y los que no. Es el momento de dar un paso adelante, de actuar.
CEG: Precisamente para actuar, y hacerlo enfocando hacia la Excelencia, ¿habría que redefinir esa excelencia? En este especial, las organizaciones hablan de innovación, transparencia, y a menudo se llama en los foros empresariales a la flexibilidad, conceptos variados e imprescindibles. ¿Cuáles son, en su opinión, los conceptos fundamentales en este momento que configuran la excelencia?
J.A.Z.: Partimos de la premisa de que reducir costes ya no basta y los negocios se hacen de otra manera. El mercado no va a admitir medias tintas. Ahora hay que hacer más con menos, hay que salir de la zona de confort, multiplicar el liderazgo en las compañías y aprender a delegarlo, hay que invertir en Innovación… Hay que fomentar la capacidad de adaptación, aceptar la complejidad y el caos.
CEG: ¿Por qué sería conveniente apostar por el Modelo EFQM en este momento?
J.A.Z.: Porque es un sistema de gestión flexible que ayuda a enfrentarse a las organizaciones a estos desafíos actuales, cada vez más competitivos. El Modelo EFQM de Excelencia es un instrumento práctico que lleva muchos años proporcionando experiencias de gran utilidad a las organizaciones a la hora de desarrollar sus modelos y sistemas de gestión, o a mejorar los que ya tienen implantados.
Nos permite a los gestores realizar un diagnóstico y obtener una guía para establecer prioridades y buscar las soluciones más adecuadas. Es, sobre todo, una magnífica herramienta de trabajo para abordar el proceso de transformación que necesitamos hoy.
CEG: ¿Qué cree que debe aportar el Club a corto y a medio plazo a socios y a la sociedad en general?
J.A.Z.: Vamos a trabajar para aportar valor no sólo a las organizaciones socias, sino a cada persona de esas organizaciones, y vamos a hacerlo también intensamente para atraer a las Pymes.
CEG: ¿Qué beneficios puede aportar el Sello de Excelencia en este momento a organizaciones españolas o europeas?
J.A.Z.: Está demostrado que las organizaciones que lo consiguen obtienen mejores resultados. El esquema de gestión en el que se basa el Sello es una excelente motivación para revisar la estrategia, hacer crecer la cultura interna de excelencia y, además, es un reconocimiento visible para una organización. Otorga prestigio ya que sólo lo consiguen organizaciones realmente excelentes.
CEG: ¿Se valora un reconocimiento a la gestión o hay otras prioridades en este momento?
J.A.Z.: Los altos niveles de reconocimientos conseguidos por las empresas españolas y, especialmente, en relación con otros países europeos, dejan claro que han entendido que la apuesta por la excelencia es clave para ser competitivos y sostenibles. Y eso es cierto tanto para las grandes como para las pequeñas empresas.
CEG: ¿Alguna recomendación a las empresas españolas desde el Club Excelencia en Gestión?
J.A.Z.: Debemos tener muy claro que ya no basta con reducir costes; que ahora los negocios se hacen de otra manera. Podría parafrasear a Dee Hock, el fundador de Visa, quien afirmó que “el problema no suele ser cómo conseguir ideas nuevas e innovadoras, sino cómo romper con las ideas antiguas”. Por eso, insisto, es hora de actuar, de dar un paso adelante.
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