Gánate a la gente con un excellence touch
Hace mucho tiempo que los líderes con un excellence touch descubrieron que no puedes dirigir una “gran” organización, de cualquier tamaño, sin ganarte a su gente, es decir, sin conseguir su adhesión, compromiso y entusiasmo, con una misión y objetivos que conduzcan a lograr grandes cosas.
Ahora, una cosa es decirlo y otra hacerlo. Hay cientos, miles de libros sobre liderazgo, pero ¿cuántos realmente sirven de ayuda en esto? Los líderes con ese excellence touch saben que cualquier directivo, para llegar a convertirse en esa clase de líder, no necesita teorías de escuela de negocio, lo que necesita es aprender a ganarse a la gente, o nunca llegará a conseguir grandes cosas.
Todos necesitamos gente que nos ayude a recorrer el camino, tanto si lo que uno quiere es comenzar un nuevo negocio, lanzar un nuevo producto, lograr que la organización se mueva hacia una nueva dirección, o captar fondos para una buena causa, o incluso, si te lo piden, ser el entrenador del equipo de fútbol de tu hijo, que va en los últimos puestos del campeonato y quieren que les enseñes lo que se siente cuando se gana varias veces seguidas. En todos esos casos necesitas gente que te ayude, porque nunca conseguirás nada extraordinario si lo intentas hacer en solitario. Y para ganarte a “esa gente”, has de cuestionarte algunas cosas acerca de ti mismo, cosas que podrían convertirte en un líder con, lo que a mí me gusta llamar, excellence touch.
Lo primero, a mi juicio, es intentar ser la mejor versión de nosotros mismos, lo que significa: ser tú mismo, conocerte a ti mismo y crecer siendo tú mismo para conseguir ser siempre alguien auténtico. A la gente nos gusta seguir y admirar a aquellos que viven su vida de acuerdo a unos principios, que son fieles a ellos incluso en los malos tiempos. Estoy seguro de que nos pondríamos rápidamente de acuerdo en que personas como Nelson Mandela o Mahatma Gandhi, entre otras muchas, demostraron su autenticidad de diversas formas.
Otra de las cosas más eficaces que uno puede hacer para continuar creciendo y dar la mejor versión de sí mismo es estar aprendiendo siempre. Alguien con apetito voraz por el conocimiento inspira a los demás con su pasión y su curiosidad y, además, está en las mejores condiciones para aportar o traer nuevas ideas que impulsen la innovación en la organización. Y se pueden encontrar buenas ideas en muchos lugares. Personalmente, puedo decir que los mejores éxitos de nuestra organización los hemos logrado partiendo de las ideas de otros, ideas que captamos durante las diversas actividades que organizamos, a lo largo del año, con las organizaciones que pertenecen al Club Excelencia en Gestión.
Muchos pensamos que liderar es un privilegio y estamos convencidos de que todas las personas que colaboran con nosotros, cuando les das la oportunidad, demuestran poseer un deseo inherente de contribuir a lograr cosas positivas, cosas también grandes. Hay un gran potencial en cada persona y la responsabilidad del líder del que hablamos es liberar todo ese caudal. Si podemos crear un entorno donde cada persona sienta que forma parte del “equipo” y que tiene la oportunidad de contribuir, entonces habremos logrado un entorno preparado para hacer grandes cosas. Y para comenzar a crear ese entorno lo primero que necesitas es demostrar confianza en tu gente.
No me puedo olvidar, en este breve recorrido por el perfil del líder con un excellence touch, de lo importante que es creer, creer realmente en lo que hacemos, y creer que podremos lograr aquello que perseguimos. Si la respuesta a esta posible pregunta no fuese un rotundo sí, sí creo, entonces ello significaría que aún tienes trabajo por hacer antes de embarcar a la gente en tu proyecto.
Estoy plenamente convencido de que ganarse a la gente es nuestro verdadero trabajo como líderes y no es algo que podamos delegar. Una cosa es que tú seas una persona que consigue buenos resultados, lo que está muy bien, y otra muy distinta que seas alguien que puede ayudar a todo un equipo, o a toda una organización, a alcanzar grandes objetivos, porque entonces la importancia de tu trabajo crece extraordinariamente. Depende de nosotros hacer que eso suceda, depende de nosotros lograr convertirnos en líderes con un excellence touch.
LIDERAZGO / GESTIÓN EMPRESARIAL
Juan Liquete, secretario general del Club Excelencia en Gestión
Artículo publicado en Executive Excellence nº92 may12