Isidro Fainé: un modelo de excelencia en filantropía
Con un total de 24.000 millones de euros, la Fundación Bancaria “la Caixa” es la primera organización filantrópica de España, la segunda de Europa y la tercera del mundo en volumen de activos, solo por detrás de la Gates Foundation (32.800 millones), y Wellcome Trust (26.300 millones), según un análisis del Instituto Coordenadas sobre las principales fundaciones filantrópicas de todo el mundo. Esta organización destina cada año más de 500 millones de euros a la realización de acciones benéficas en el ámbito social, cultural, educativo y científico, y sus programas y actividades llegaron a más de 11 millones de personas en 2017.
Se trata de una de las entidades que más activamente trabaja por el avance de nuestra sociedad, en gran parte gracias al empeño de su presidente, Isidro Fainé, que ha sido galardonado con el Premio Forbes a la Filantropía 2018, por su labor al frente de la Fundación.
En su discurso, el directivo repasó los 114 años de historia de “la Caixa”, poniendo especial énfasis en la vocación de servicio que siempre ha acompañado al espíritu de la organización. “Francesc Moragas puso en marcha en 1904 una caja de pensiones y de ahorros, pero cualquiera que conozca su historia solamente podrá reconocer que la vocación de aquella empresa fue eminentemente filantrópica. Nadie hubiera dicho entonces, ni diría hoy, que aquella caja de pensiones y de ahorros era una entidad financiera al uso. Desde el primer momento, el estímulo que animó el trabajo de Moragas y de todos quienes le acompañaron, fue el de servir a los demás. Por eso, la obra social y la actividad financiera fueron de la mano durante toda la historia de la entidad”, afirmó.
Isidro Fainé recalcó que la Fundación no solo mantiene, sino que aumenta cada año su “compromiso” con la obra social. Prueba de ello es que en 2018 invirtió 520 millones de euros, 10 millones más que el ejercicio anterior. “Seguiremos haciendo obra social con la prudencia que nos caracteriza, prestando toda la atención a las necesidades sociales que vemos, escuchando los corazones de las personas, adivinando sus sentimientos y descubriendo las penas no expresadas y las quejas no procedidas. Porque esta labor únicamente se puede detectar si te encuentras dentro de los colectivos más necesitados, no si lo miras desde lejos”, declaró.
Asimismo, mostró su apuesta por reforzar la labor filantrópica en ámbitos como el cultural, el educativo o el científico. “Queremos seguir acercando la cultura a todos los rincones de nuestro país. Consideramos prioritario insistir en los programas de educación, estimulando el talento, la cultura del esfuerzo y la formación integral de la persona. Por ello, este año doblamos el número de becas de postgrado. En investigación y ciencia queremos triplicar nuestras inversiones en el largo plazo, con el fin de lograr la excelencia en este campo”, señaló.
En su intervención también anunció que la Fundación Bancaria “la Caixa” pretende desarrollar “un centro internacional de prestigio de grandes debates sociales” similar al Foro Económico Mundial que tiene lugar anualmente en Davos (Suiza) “tan pronto como sea posible”.
Desde un punto de vista más personal, Isidro Fainé realizó una mención especial a sus padres, quienes “con su ejemplo y cultura del esfuerzo” le ayudaron desde muy joven a “palpar las necesidades que percibía en la gente”.
Comprometido con la sociedad
El presidente de la Fundación Bancaria “la Caixa” recibió el galardón de manos de Florentino Pérez, presidente de ACS, quien no dejó pasar la oportunidad de resaltar las “piedras angulares” que históricamente han guiado el compromiso de Fainé con la sociedad: vocación de servicio, constancia, perseverancia, paciencia y clarividencia. “Tiene una visión clara de cualquier situación, en especial de los problemas sociales y de la forma de encararlos. No solo ve los problemas de la gente, sino que los vive”, resaltó.
Asimismo, aprovechó la ocasión para desvelar algunos detalles personales, y también los menos conocidos, del directivo catalán. “Más allá de lo que ha conseguido a lo largo de su vida desde el punto de vista profesional, que es mucho, Isidro es una buena persona; es humilde, sencillo y cercano. Quienes le conocemos sabemos que no le gusta armar ruido, ni tampoco recibir medallas, porque su meta son únicamente las personas”, señaló. En este sentido, insistió en la importancia que Fainé otorga a la relación personal con sus empleados. “Me consta que una de sus obsesiones es conocer de primera mano a todos sus trabajadores. Nunca le falta tiempo para ellos, para compartir sus inquietudes, sus preocupaciones y sus alegrías… Con su compromiso social y su capacidad de servicio, Isidro personaliza como nadie la famosa frase de Francesc Moragas: el trabajo en la cabeza, y las personas en el corazón”, destacó.
El presidente de ACS también quiso subrayar la capacidad de trabajo que define a Fainé, sus ganas de aprender, y su afán de superación, que le han llevado a ocupar uno de los cargos más relevantes del panorama financiero nacional. “Nació en Manresa en el seno de una familia de padres campesinos, y su primera experiencia laboral fue en un taller de bicicletas. Esos fueron los primeros pasos de un trabajador infatigable que más tarde ingresó en la banca como auxiliar administrativo y a fuerza de trabajar, estudiar y aprender, y gracias a una gran vocación de servicio, ha llegado a liderar un gran imperio financiero y empresarial… En su trabajo siempre está presente el contenido de una placa que guarda en su despacho de Cataluña con una inscripción que reza: no hay límite en lo que un hombre puede hacer o donde pueda llegar, si no le importa quién se cuelgue las medallas”, recalcó.
Es más, Pérez definió a Fainé como un “hombre clave para el desarrollo económico de nuestro país, al que ha contribuido a ganar prestigio internacional con su obra y su gigantesca trayectoria profesional”.
Por su parte, Andrés Rodríguez, editor y director de la revista Forbes, hizo hincapié en la necesidad de “más filántropos que devuelvan a la sociedad civil las oportunidades que la sociedad les dio”.
Al acto de entrega del Premio Forbes a la Filantropía 2018 también asistieron otros destacados líderes empresariales como José María Álvarez Pallete, presidente de Telefónica; Ignacio Garralda, presidente de Mutua Madrileña; Jaume Giró, director general de la Fundación Bancaria “la Caixa”, Ismael Clemente, CEO de Merlin Properties; Esther Alcocer Koplowitz, miembro del Consejo de Administración de FCC; Federico Mayor Zaragoza, presidente Fundación Cultura de Paz; Javier Solana, presidente de ESADEgeo o César Alierta, presidente de la Fundación Telefónica.
Programas sociales con vocación transformadora
Doctor en Ciencias Económicas por la Universidad de Barcelona, ISMP en Business Administration por la Universidad de Harvard y diplomado en Alta Dirección por IESE, Isidro Fainé es vicepresidente de Telefónica y consejero de Suez y del Bank of East Asia. También ocupa la presidencia de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y del European Savings Banks Group (ESBG) y es vicepresidente del World Savings Banks Institute (WSBI). Es académico numerario de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras y de la Real Academia de Doctores y desde 2016 preside la Fundación Bancaria “la Caixa” y CriteriaCaixa.
La Fundación es el resultado de la transformación de ”la Caixa” en fundación bancaria, en junio de 2014, en cumplimiento de la Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias, de 27 de diciembre de 2013. Desde entonces, su labor se ha centrado en impulsar programas sociales con vocación transformadora, priorizando líneas de actuación que cubran las necesidades básicas de los colectivos más vulnerables y promuevan la igualdad de oportunidades.
La entidad ha dedicado más de 5.000 millones de euros a proyectos en diferentes ámbitos sociales durante la última década. Solo en 2017, la Fundación Bancaria ”la Caixa” atendió a más de 60.000 niños en situación de vulnerabilidad gracias al programa de superación de la pobreza CaixaProinfancia; facilitó 32.000 puestos de trabajo a personas en riesgo de exclusión social a través de Incorpora; logró la participación de 820.000 personas mayores en su programa de envejecimiento activo; puso a disposición de los ciudadanos con más dificultades para acceder a una vivienda un parque de 33.000 pisos sociales; prestó asistencia a más de 23.000 personas con enfermedades avanzadas, y movilizó a más de 16.000 voluntarios que facilitaron la puesta en marcha de estas iniciativas.
A lo largo del presente ejercicio y el que viene se continuarán afianzando el bagaje y el reconocimiento logrado en divulgación cultural y científica. El objetivo es mantener los niveles de excelencia alcanzados en los centros CaixaForum, CosmoCaixa y en las exposiciones itinerantes, gracias a muestras de producción propia y a las alianzas estratégicas con instituciones culturales internacionales de referencia, como el Museo del Prado, el British Museum, el Louvre, el Museo Thyssen-Bornemisza o la Colección de Arte Contemporáneo de “la Caixa”.
La entidad también mantendrá su decidida apuesta por la investigación médica y la formación de excelencia, un área que contó con una inversión de más de 60 millones de euros en 2017 y que prevé alcanzar los 90 millones de presupuesto en 2019. Dado que muchos de los grandes retos científicos del momento están vinculados a la salud, la investigación en este ámbito está siendo uno de los ejes principales de actividad, con especial incidencia en las enfermedades cardiovasculares, infecciosas, neurociencia y oncología. Así, se pondrán en marcha nuevas becas ampliando el número de las destinadas a estudios de posgrado y doctorado, para formar a los líderes del futuro y atraer el talento internacional.
Texto publicado en Executive Excellence nº151 septiembre 2018.