Executive Excellence Especial COVID19
Ver Executive Excellence Especial COVID-19
En días nuestro mundo ha dado un vuelco; si hace poco era el Brexit nuestra preocupación, hoy es nuestra supervivencia personal, laboral y como país. En un entorno de salud construido sobre la base de la atención al paciente sufrimos la ausencia de un concepto centrado en el cuidado de la comunidad.
Pensábamos que nuestros sistemas sanitarios eran superiores, los más robustos. El problema es que se subestimó la capacidad de contagio del COVID-19 y las implicaciones que representaba para nuestra demografía avejentada. Si el Véneto y la Lombardía fueron el epicentro italiano, hoy la comunidad europea más afectada es Madrid. Este interesante artículo de Johns Hopkins nos ayuda a entenderlo.
Nos esperan tiempos difíciles, muy difíciles, pero continuaremos aportándoles información pertinente, cualificada, proveniente de expertos, y poco circulada por nuestro país, que esperamos les sea útil. En todos estos contenidos hay un máximo común denominador en la búsqueda de una solución y Bill Gates, que profetizó esta pandemia, nos lo explica con claridad: test y más test y aislamiento; merece la pena que lean esta larga exposición de la entrevista que le realizó Chris Anderson, CEO de TED. Además, leyendo el artículo de Alex Gladstein comprenderán por qué Taiwan, Corea del Sur y Singapur han tenido éxito combatiendo la pandemia.
Si Divya Chander hace que sea comprensible la complejidad del COVID-19, Nell Watson nos aporta una guía práctica para nuestro cuidado diario.
Otra de las cosas que ha sacado a la luz esta pandemia es la debilidad de la UE. Si comparamos la reacción de EE.UU. y la nuestra, comprenderemos por qué resulta tan incapacitante carecer de una autoridad fiscal y además, una lucha de este calibre ha de ser liderada. Nuestras competencias sanitarias delegadas son un hándicap cuando la velocidad de reacción es vital.
Las consecuencias de las actuaciones políticas se delimitarán... o no, pero hay lecciones a extraer. Esos entornos donde el filtro de acceso es la meritocracia, el conocimiento, la experiencia, la capacidad
de gestión, el trabajo en equipo, la humildad y el sentido común están mejor cualificados para liderarnos en momentos de increíble complejidad. Hemos de ser lo suficientemente generosos como para buscar el bien común por encima de cualquier otro interés.
Me comentaba un buen amigo que en una empresa y en orden decreciente, lo mejor era: listo trabajador, listo vago, tonto vago y tonto trabajador... ¡No hay nada peor que un tonto con iniciativas!
En estos momentos de dificultad, queremos agradecer a la Fundación Bancaria “la Caixa” su apoyo. En situaciones como esta es donde las grandes instituciones demuestran sus valores y lo que son.
Federico Fernández de Santos Ortiz, Editor de Executive Excellence