El Próximo Management: renovando empresas, instituciones y sociedad
Richard Straub sobre la vital importancia del management_
Todos queremos hacer del mundo un lugar mejor, pero son pocos quienes tienen alguna idea constructiva de cómo hacerlo. Uno de los que sí la tuvo fue Peter Drucker quien, desde el principio, entendió que el management era mucho más que una función empresarial; era un rol, y una capacidad vital, para nuestras instituciones, incluidos el sector público y las organizaciones que proveen salud, educación, seguridad y cultura. Todas ellas deben contribuir a la sociedad creando valor en su ámbito, ya sea este económico, social o cultural. Que Drucker estaba en lo cierto y que la calidad del management es un factor clave en el éxito económico y social hoy no se discute.
La Revolución Industrial es tanto una historia de innovación, emprendimiento y management como lo es de física y ciencia. El laureado economista con el Nobel, Robert Solow, descubrió que la mejora en las prácticas y productos de management a comienzos del siglo XX fue la principal fuente de crecimiento en EE.UU. Más recientemente, el trabajo de John van Reenen y Nicholas Bloom ha demostrado que las mejores prácticas de management son un elemento diferenciador en el rendimiento, no solo entre empresas, sino también entre países y regiones; esto explica gran parte de la ventaja en productividad de las empresas estadounidenses sobre las europeas. El management importa, y mucho.Hoy no se discute que la calidad del management es un factor clave en el éxito económico y social. La Revolución Industrial es tanto una historia de innovación, emprendimiento y management como lo es de física y cienciaSi el management en el sector privado, el sector público y la sociedad civil comparten el mismo imperativo —el de rendir—, Drucker dejó claro que el valor económico es el pre-requisito de todo valor social creado conjuntamente por todas las instituciones de una sociedad moderna y compleja. De ahí que su dicho de “el management se ha convertido en el órgano específico de todas las instituciones contemporáneas y en el órgano integrador de nuestra sociedad de organizaciones” sea especialmente importante en tiempos como los actuales, donde el tambaleante rendimiento de nuestras instituciones está socavando su papel de baluarte frente a las ideologías modernas y sus tendencias totalitarias. Drucker dejó claro que el valor económico es el pre-requisito de todo valor social creado conjuntamente por todas las instituciones de una sociedad moderna y compleja
El management en la sociedad. La realidad preocupante de hoy
Desde la Segunda Guerra Mundial, la profesionalización generalizada del management ha hecho una contribución significativa a la creciente prosperidad mundial. Los desafíos a los que se han enfrentado las organizaciones como los avances tecnológicos, la globalización y las recientes olas de disrupción y crisis, las han obligado a desarrollar niveles de resiliencia y agilidad sin precedentes. Evidentemente, este es el entorno del management de las empresas: el éxito o el fracaso lo determinan los mercados en los que compiten las firmas y no hay tregua en la competencia. Sin embargo, el reconocimiento del management como una palanca clave para la sociedad en su conjunto no ha llegado a otros ámbitos e instituciones. El management principalmente se enseña en las escuelas de “negocios”. Las “escuelas de management” más inclusivas, aquellas que tienen la capacidad para llegar a todas las instituciones, son una excepción.El management principalmente se enseña en las escuelas de “negocios”. Las “escuelas de management” más inclusivas, aquellas que tienen la capacidad para llegar a todas las instituciones, son una excepción
La consecuencia es que se ha perdido la idea de que las instituciones en su totalidad tienen como objetivo y obligación, entre otras cosas, el de trabajar juntas para incrementar la creación de valor en toda la sociedad, mientras al tiempo vemos la política de "mano dura”, el acaparamiento del sector público de papeles cada vez más relevantes en la “gestión” de todas estas crisis superpuestas y la asunción de influencias indebidas por parte de ONG en cuestiones que deberían estar sujetas a procesos democráticos. La guerra de Greenpeace contra los transgénicos, y su exitosa campaña contra el Arroz Dorado, es una muestra de los efectos negativos causados por la existencia de grandes poderes sin cortapisas.Se ha perdido la idea de que las entidades en su conjunto tienen como objetivo y obligación, entre otras cosas, el de trabajar unidas para incrementar la creación de valor común
En nuestros estados modernos parece que burócratas, muy alejados de las realidades de la creación de valor e innovación, se están haciendo con el control; como ejemplo esos instrumentos regulatorios del Green New Deal europeo que agravan esa tendencia tan típica de las grandes empresas a burocratizarse. A esto se suma, como señaló Adrian Wooldridge en una columna de Bloomberg, que el management en sí, en las formas excesivamente académicas de escuelas de negocios, en las consultoras que imitan a otras y en las empresas complacientes, se ha quedado sin grandes ideas, incluida la idea la más importante de todas: que la innovación en el management es, en sí misma, quizás la fuente más poderosa de crecimiento y ventaja competitiva.
Todo esto nos deja en una situación donde el “concierto de las instituciones”, que en nuestra vida diaria debería proveernos sin problemas de bienes y servicios, como atención médica, educación, seguridad o diversidad cultural, está tocando de forma tan cacofónica que nos lleva a una notable pérdida de confianza institucional. En 2023, Edelman señaló un debilitamiento significativo de los lazos sociales, con divisiones abiertas a lo largo de líneas de clase y una crisis de confianza en el liderazgo tradicional. Notablemente, solo las empresas se veían como competentes y éticas. Los líderes políticos, que deberían actuar como los directores de la orquesta, parecen haber perdido el sentido de la necesidad de creación de valor como una tarea interinstitucional conjunta. A medida que los estados expanden su papel en la economía, y en la sociedad en general, la falta de experiencia y conocimiento en management se está convirtiendo en un grave problema para el funcionamiento efectivo de la sociedadEuropa se construyó sobre las ideas de sus “padres fundadores”, quienes lanzaron su proyecto para traer paz y prosperidad a un continente que, durante siglos, había sido azotado por guerras fratricidas: ideas centradas alrededor de una coordinación central complementada con descentralización, emprendimiento y creación de valor; con competencia justa, protección del consumidor y un compromiso con el principio de subsidiariedad. Por eso hoy sorprende ver cómo el liderazgo político busca organizar y gestionar Europa con ideas profundamente arraigadas en paradigmas de la era industrial, como el micro-management y el control de mando desde arriba. A medida que los estados expanden su papel en la economía, y en la sociedad en general, la falta de experiencia y conocimiento en management se está convirtiendo en un grave problema para el funcionamiento efectivo de la sociedad.
El Nuevo Management: facilitador del progreso social
Es una trágica ironía que nos hayamos convertido en una sociedad en la que los actores clave se creen capaces de gestionar todo, justo en el momento en que las tecnologías de control y vigilancia, potenciadas por la IA, lo hacen técnicamente factible. Esto plantea, en el mejor de los casos, la pesadilla de un estado “niñera asfixiante” y, en el peor, de un taylorismo potenciado por la IA que se infiltre en nuestras instituciones. Medir la productividad de los trabajadores remotos contando pulsaciones de teclas es solo un ejemplo en el extremo relativamente benigno del espectro. Por lo tanto, disrumpir y desplazar el paradigma de la era industrial que lo sustenta se ha convertido en un proyecto crítico para toda la sociedad.Es una trágica ironía que nos hayamos convertido en una sociedad en la que los actores clave se creen capaces de gestionar todo, justo en el momento en que las tecnologías de control y vigilancia, potenciadas por la IA, lo hacen técnicamente factible
Las empresas son conscientes de la necesidad de cambio y ya han dado pasos importantes en esa dirección, pero todavía queda mucho por hacer. En la Drucker Society llamamos a esta iniciativa el Nuevo Management (The Next Management): una llamada a las armas para que todas las instituciones reconozcan que el activismo de arriba abajo y la cura de los síntomas no servirán para salvar la sociedad y la civilización; necesitarán movilizar todas sus energías para encontrar soluciones mejores. Imaginamos esto como una iniciativa de cinco años de duración, e iremos avanzando sobre los temas a lo largo de cada uno de los próximos Foros en Viena. Para lograrlo, debemos comprender aquellas grandes palancas sobre las cuales nos podamos apalancar con fortaleza. Partimos de la idea de Drucker de que el management (incluidas sus dimensiones de liderazgo y emprendimiento) es algo fundacional para las sociedades modernas. El concepto de Próximo Management se presentará en el Foro de este año bajo el tema de 2024: “El nuevo Trabajo del Conocimiento”.
El Nuevo Management (The Next Management) es una llamada a las armas para que las instituciones reconozcan que necesitarán movilizar todas sus energías para encontrar soluciones mejoresYa en la década de 1960, Drucker percibió que el entonces nuevo fenómeno del “trabajo del conocimiento” resultaba incompatible con las clásicas suposiciones “mecanicistas” respecto de cómo deberían operar los individuos y las organizaciones. Planteó la idea de que el trabajador del conocimiento requeriría de autonomía para lograr su objetivo. La tarea del management era la de capacitar y habilitar al trabajador del conocimiento, en vez de “gestionarlo” en el sentido tradicional. Sin embargo, Drucker también sabía que, al final del siglo XX, la transición de una sociedad industrial a una sociedad del conocimiento seguía estando incompleta y por ello, en su última obra magna, declaró que la mayor y más importante preocupación era la de hacer productivo el trabajo del conocimiento. ¿No es este el momento, ahora que están emergiendo nuevas respuestas a este desafío y con la IA como una herramienta de conocimiento y aprendizaje sin precedentes para la humanidad y para los negocios?
En la década de 1960, Drucker percibió que la tarea del management era la de capacitar y habilitar al trabajador del conocimiento, en vez de “gestionarlo” en el sentido tradicional Con este espíritu, la iniciativa Nuevo Management tiene como objetivo establecer una visión ambiciosa del management como palanca clave para lograr el progreso social. Lo vemos como una poderosa herramienta, para sincronizar nuestras ambiciones como individuos, y para sociedad dada la realidad cada vez más compleja e impredecible en la que vivimos. Este es el quid de la cuestión. Requiere una dosis inicial de humildad: la realización de que no sirve de nada esperar que la IA y la tecnología digital corrijan la incorregible imperfección humana. ¡Tomen nota Elon Musk y Sam Altman! No existe tal cosa, igual que nunca existirá un ser humano perfecto, una sociedad perfecta o una organización perfecta. Tenemos que aceptar que hay algunas cosas en la naturaleza que no podemos y nunca podremos gestionar directamente. Lo que sí podemos hacer es reconocer y adaptarnos a realidades más fuertes que nosotros y amoldar toda nuestra ingenuidad creativa para encontrar nuevas formas de sobrevivir.¿No es este el momento de hacer productivo el trabajo del conocimiento, ahora que están emergiendo nuevas respuestas a este desafío y con la IA como una herramienta de conocimiento y aprendizaje sin precedentes para la humanidad y para los negocios?
Para nosotros, esto significa abordar la agenda emergente con siete ideas clave principales, todas las cuales implican una vuelta a lo básico, cuestionando las suposiciones y creencias fundamentales existentes sobre el management.
- Innovación, más que eficiencia.
- Ecosistemas, más que instituciones individuales.
- Enfoque a largo plazo, más que a corto plazo.
- Aumentación humana, más que automatización.
- El management como un arte, más que como una ciencia.
- Anclado en la realidad, más que en la ideología.
- Reforma radical, más que revolución.
La Peter Drucker Society Europe quiere ser un catalizador de este movimiento de época, utilizando su amplio poder de convocatoria y alcance internacional para enfocar la atención en los caminos más prometedores para avanzar Reencuadrar el management para el siglo XXI es una tarea ingente. Pero la transición ya está en marcha con las “nuevas” prácticas en los negocios y los “nuevos” programas en escuelas de negocios innovadoras explorando el camino que tenemos por delante. La Peter Drucker Society Europe quiere ser un catalizador de este movimiento de época, utilizando su amplio poder de convocatoria y alcance internacional para enfocar la atención en los caminos más prometedores para avanzar. Drucker siempre insistió en que pensar en el management como algo exclusivamente relacionado con los negocios era trivializar su verdadero alcance y responsabilidad. El proyecto Nuevo Management nos ofrece una oportunidad sin precedentes para rehacerlo en la forma que sus defensores siempre desearon: resaltando su capacidad para actuar como una fuerza para el bien de los individuos, las organizaciones y la sociedad en su conjunto. Es “la más noble de las profesiones”, como lo expresó de la manera más impactante posible el fallecido Clayton Christensen en su legado en el artículo de la Harvard Business Review: “¿Cómo medirás tu vida?”.
Richard Straub, fundador y presidente de la Peter Drucker Society Europe y del Global Peter Drucker Forum.
Este artículo apareció originalmente en Global Focus. The EFMD business magazine, bajo el título “The Next Management: Renewing Companies, Institutions, and Society”, y se publica en español con la autorización expresa de su autor.
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Artículo publicado en 2024.