Dos hombres versátiles
Eduardo Punset y Marcos Urarte, dos hombres versátiles, con carreras brillantes y una capacidad intelectual aún más envidiable, reflexionan para Executive Excellence sobre el sentido más básico de la vida, del futuro de las empresas y de su propia historia vital. Una combinación exclusiva: las ideas de Punset, divulgador científico y director del programa de TVE “Redes”, con las opiniones de Marcos Urarte, consultor estratégico, conferenciante internacional y presidente del grupo Pharos.
Despojados de sus múltiples títulos y galardones, estos dos amigos y socios se sientan frente a frente para contarnos, con naturalidad y sencillez, cómo perciben el entorno actual, y cómo predicen el que está por llegar.
FEDERICO FERNÁNDEZ DE SANTOS: ¿Qué es la felicidad?
EDUARDO PUNSET: La felicidad es un viaje pero podríamos definir como la ausencia de miedo. Pero también me hace feliz el compartir una comida con los amigos, pasear con mis perros, jugar con mis nietas y hablar con mis fósiles.
MARCOS URARTE: No lo tengo claro. Depende del día, pero sí sé que es diferente la felicidad de la buena vida. Creo que es muy importante el encontrar un sentido a lo que estamos haciendo. Para mí, es fundamental que mi entorno más próximo esté bien. Ahora me hace feliz disfrutar de mi nieto Unai y muy especialmente ver a mis padres disfrutar de él.
F.F.S.O: ¿Cómo ve la situación actual en el mundo y particularmente en España?
E. P.: Soy escéptico y pesimista. Se están perdiendo unos valores que cohesionaban a la sociedad. Nos creemos que somos en centro del universo y estamos poniendo en riesgo el futuro de nuestro planeta. En las escuelas deberían enseñar a los niños a conocerse emocionalmente, que lo más importante en esta vida es ser persona. Estoy coordinando diferentes proyectos relacionados con estos temas y es el legado que me gustaría dejar a mis nietas.
M.U.: Estamos viviendo tiempos extraordinarios, con grandes cambios. Los paradigmas existentes están desapareciendo, lo que era válido, ya no lo es. El factor tiempo se ha vuelto vital y los principales actores económicos están desapareciendo del escenario, dando la alternativa a los nuevos. La situación la veo compleja pero apasionante. Vamos a vivir un nuevo renacimiento, pero no sé qué papel jugaremos. Será un partido muy interesante, pero igual estamos en el banquillo, o peor, en las gradas. Particularmente, estoy muy preocupado por la situación en España. Mi sensación es que esta situación nos está debilitando y, además, lo está haciendo mediante el síndrome de la “rana en la olla hirviendo”: nos estamos quemando sin darnos cuenta. Tenemos que despertar y saltar de la olla, antes de que sea demasiado tarde. No estamos en una época de cambio, sino en un cambio de época.
F.F.S.O: ¿Qué persona le ha influido más en la vida?
E. P.: Me han influido tantas personas, que necesitaría todo el espacio de la revista para mencionarlas. Llevo más de 12 años entrevistando a los principales científicos del mundo y de cada uno he aprendido algo. Cada día me siento más ignorante. Por supuesto, que también me influyen mis nietas, mis perros, las estrellas, lo desconocido, e incluso Marcos, que consigue que haga cosas que nunca haría.
M.U.: Yo creo que en la vida nos influyen muchas personas y que de todas podemos aprender algo, incluso, lo que no hay que hacer. Se me hace muy difícil destacar alguna, pero por contestar a la pregunta, mencionaría a mis padres y profesionalmente a Javier Fernández Aguado. Mis padres me han enseñado lo que es el amor sin condiciones, la honestidad, el respeto y el valor del esfuerzo. De Javier he aprendido, y aprendo, que la curiosidad no tiene límites y que cada día merece la pena vivirlo con intensidad.
F.F.S.O: ¿Cuáles son los principales problemas de las empresas españolas?
E. P.: De esto preguntarle a Marcos. Para mí, la empresa es como una comunidad de virus y bacterias. Lo único que sé es que las empresas deberían aprender mcuho más de la ciencia y la naturaleza.
M.U.: No podemos hablar genéricamente de empresas españolas, ya que las circunstancias son totalmente diferentes. En nuestro país, tenemos empresas en posiciones privilegiadas a nivel mundial, verdaderos campeones mundiales: Inditex, Banco Santander, BBVA, Telefónica, Abertis, Acciona, Iberdrola, etc.
Asimismo, tenemos campeones nacionales que podrían perfectamente competir a nivel global: La Caixa, Corte Inglés, Laboratorios Esteve, etc.
Y, por supuesto, tenemos empresas de menor tamaño, pero también con grandes proyectos internacionales, por ejemplo GTD, y por qué no, nuestro Grupo Pharos, con presencia en varios países de Latinoamérica.
Sinceramente, pienso que el nivel directivo español es muy alto, y que hay un gran tejido empresarial.
Las empresas españolas tienen que “abrir las ventanas”, para ver lo que “está ocurriendo fuera” y dejar que “entre aire fresco”. Por eso, nosotros intentamos trasladar lo importante que es el estar permanentemente en alerta y ahí es donde empresas como la nuestra pueden ayudar.
F.F.S.O: ¿Qué consejos le daría a los directivos?
E. P.: El mismo que a todas las personas. Que desaprendan la mayoría de cosas que saben, para dejar espacio a las nuevas ideas y que se rían más.
M.U.: No soy nadie para dar consejos, simplemente me gustaría compartir unas reflexiones. Voy a mencionarlas sin ningún tipo de prioridad: capacidad de anticiparse y adaptarse a las nuevas situaciones, ser flexible (hay ocasiones en las que es mejor ser junco que roble), humildad para reconocer que no lo sabemos todo y que lo que era válido hasta hoy, mañana puede no serlo; que creen organizaciones seductoras, que el éxito no es acumulable y que podemos dejar de tenerlo en cualquier momento, que la generosidad es la mejor inversión, que antes de recortar en innovación, marketing y talento, lo piensen dos veces y después dos veces más, que se salgan del marco establecido, que rompan fronteras y que el compromiso debe ser mutuo.
Me gusta hacer la siguiente reflexión: Los directivos de primera se rodean de gente de primera. Los directivos de segunda se rodean de gente de tercera para parecer de primera.
F.F.S.O: ¿Y a los empleados?
E. P.: Además de lo dicho anteriormente, que no crean demasiado a sus jefes. Hay mucho psicópata suelto.
M.U.: Que sean felices con lo que hacen. Que busquen aquellas empresas donde les permitan alcanzar sus sueños, que el tren pasa muchas veces por nuestra puerta y, sobre todo, que sean honestos consigo mismo.
F.F.S.O: ¿Cómo se definiría?
E. P.: Un curioso impenitente y un enamorado de la vida.
M.U.: Me gustaría que me vieran como un arquitecto social. Alguien que intenta construir una obra que le supere, con las personas. Creo totalmente que lo más importante de una empresa son las personas.
presidente del grupo Pharos, conferenciante internacional y consultor estratégico
director del programa de TVE "Redes" y divulgador científico
Entrevista publicada en Executive Excellence nº63 oct09